Compromiso Social y Medioambiental
Los agricultores son contratados para sembrar exclusivamente para nuestras compañías, bajo estricta supervisión y acompañamiento de nuestros agrónomos en todos los aspectos de la producción agrícola, lo cual incluye talleres de capacitación, visitas semanales y capacitación directa en el campo. Los capacitamos en el uso y aplicación segura de pesticidas, utilización de controles biológicos, uso de productos agroquímicos permitidos (Lista Persuap de USA y normas Europeas) y en general en las buenas prácticas agrícolas. Adicionalmente con la implementación de sistemas de riego por goteo en los cultivos, se ha evitado el desperdicio de millones de litros de agua.
Nuestro modelo permite comprar toda la producción a precios preestablecidos, y que no dependen de las normas económicas de demanda y oferta.
Hoy existen en Perú y Colombia más de 600 familias que se desarrollan económicamente gracias a la relación comercial establecida con nuestras empresas. Con esto aportamos al crecimiento social y económico de los dos países donde operamos.
La empresa se ha caracterizado por tener en cuenta el medio ambiente en todas sus operaciones. Cada vez más actividades de la empresa buscan incorporar interna y externamente una cultura del no-desperdicio, no-degradación y protección del medio ambiente. Igualmente, hay una búsqueda constante para mejorar las condiciones de los trabajadores y agricultores, entendiendo que la sostenibilidad de la empresa depende de la sostenibilidad en el campo.
Nuestros Valores
Compromiso:
Apoyar al agricultor en la construcción de un esquema de sostenibilidad en el largo plazo.
Responsabilidad con el medio ambiente:
Desarrollar prácticas agrícolas sostenibles, así como procesos productivos y logísticos limpios.
Reciprocidad:
Aportar valor y rentabilidad para toda nuestra cadena de valor: agricultores, colaboradores, clientes, proveedores y accionistas.
El cultivo del ají es una actividad de gran impacto social; Esto se debe a que más del 70% de su costo corresponde a mano de obra.
En Colombia y Perú nuestros cultivos se han convertido en una valiosa oportunidad de generación de empleo.